En el partido más difícil ya aparecieron sus atributos: jerarquía individual y rendimiento colectivo.
Decir Italia es, de algún modo, decir fútbol. La pelota está en la tradición de ese país europeo. Y también Italia está en el ADN de las Copas Mundiales. Sin embargo, es sabido que los azzurri no estuvieron en las últimas dos citas máximas: ausentes en Rusia 2018 y ausentes en Catar 2022. Por eso Italia apuesta a reconstruirse desde las bases. Y en este torneo juvenil que se realiza en Argentina está dispuesto a demostrarlo.
El entrenador Carmine Nunziata es el arquitecto de este equipo que tiene mucha más fantasía de lo indica la historia del fútbol italiano. Lleva más de una década trabajando con las categorías formativas de la selección. Con un estilo ofensivo, que no olvida la receta de la disciplina táctica que identifica a Italia, salió a sorprender a Brasil. Nunziata apuesta a jugar con un enlance que por detrás de la dupla delantera maneja los hilos del equipo.
Esa posición la ocupa Tomasso Baldanzi. De corta estatura, con la número 10 en la espalda y el balón pegado a su zurda, si no fuera por su nombre, su apellido y su camiseta cualquiera podría decir que es un futbolista sudamericano. Baldanzi ya demostró su calidad en la Serie A, donde suele ser titular en el Empoli. Incluso fue el artífice de un gran triunfo de su equipo en el Giuseppe Meazza: marcó el 1 a 0 que valió la victoria ante el actual finalista de la Champions League. Desde el primer minuto de este torneo, el número 10 demostró por qué las miradas estaban puestas en él.
Italia vs Brasil | Grupo D | Copa Mundial Sub-20 de la FIFA Argentina 2023™ | Highlights
Vídeo resumen del partido entre Italia y Brasil jugado en el Estadio Mendoza, el domingo, 21 de mayo de 2023, a las 18:00 (hora local).
Su gran socio en la mitad de la cancha fue Cesare Casadei, el capitán italiano, que aporta equilibrio en el centro del campo. Pero no solo eso. Casadei sí juega como un auténtico mediocampista europeo: elegancia, buena pegada y presencia en las dos áreas. Lo demostró con dos tantos.
Entre los dos fueron tejiendo el gran triunfo italiano, que además contó con la complicidad de los hinchas locales. Por la gran rivalidad histórica que tienen Argentina y Brasil, quienes estaban en las tribunas del Estadio de Mendoza tomaron partido por el equipo azul. Celebraron sus goles. Festejaron los toques. Y se entretuvieron con cada una de las gambetas de Baldanzi.
Irse al entretiempo 3 a 0 arriba en un debut de una Copa Mundial no es algo habitual. Acaso haya jugado algo de eso en el equipo italiano, que en el segundo tiempo no pudo sostener la excelente demostración de los primeros 45 minutos. Sin embargo, también rindió una materia que lo deja como uno de los equipos a tener en cuenta: ante un rival como Brasil, supo sostener el resultado incluso cuando la ventaja se volvió mínima.
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