MANILA (Filipinas) – Quizás fue el Haka antes del partido lo que impresionó a los hombres de Steve Kerr, pero su lento comienzo permitió a Nueva Zelanda abrir una ventaja de 10 puntos. No hubo pánico, EE.UU. hizo el trabajo retomando la ventaja antes del medio tiempo y logrando al final una cómoda victoria por 99-72.
Los Tall Blacks buscarán su primera victoria dentro de dos días cuando se enfrenten a Jordan. Mientras tanto, Estados Unidos podría incluso hacerse con el primer puesto del grupo con una victoria sobre Grecia.
Punto de inflexión: Nueva Zelanda atrajo la atención del mundo con su Haka habitual antes del partido, y pareció ponerlos de buen humor para comenzar el partido también en sexta velocidad. Castigaron a la defensa de EE. UU. para tomar una ventaja de 14-4 y sentir el amor de los 10,978 fanáticos en el Mall of Asia Arena.
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Pero una vez que EE.UU. abandonó su cobertura de caída y pasó a cambiar defensivamente, con Paolo Banchero como el hombre en el medio, se defendieron y se fueron al vestuario en el entretiempo con una ventaja de 45-36. Nueva Zelanda no les permitió abrir una ventaja de 20 puntos hasta el final del juego, pero tampoco pudo volver a un solo dígito contra un ataque equilibrado de Estados Unidos.
Jugador del Juego de TCL: Banchero cumplirá 21 años en noviembre, pero parecía un veterano experimentado desde el banquillo. Logró 21 puntos, el máximo del juego, anotando triples consecutivos en el tercer cuarto, cuando Estados Unidos estaba poniendo más luz entre los dos equipos.
Banchero disparó 8 de 10 tiros de campo y también tuvo 4 bloqueos, el máximo del juego.
Las estadísticas no mienten: Nueva Zelanda es conocida como un equipo de ritmo rápido, lideró toda la Copa Mundial de Baloncesto FIBA 2019 en anotaciones, pero ni siquiera ellos pudieron igualar el ritmo de este equipo. Estados Unidos tuvo una ventaja de 22-6 en puntos de contraataque, resumiendo perfectamente lo que hacen mejor.
En pocas palabras: además del primer cuarto, el entrenador Kerr estará contento tanto con la parte ofensiva como con la defensiva, pero también con la gestión de la carga. Sus 12 jugadores obtuvieron minutos, Jalen Brunson y Anthony Edwards los lideraron con 25 y 24 minutos, respectivamente.
Nueva Zelanda no se asustó, cuatro hombres anotaron dos dígitos en anotaciones, liderados por Reuben Te Rangi con 15. Tienen sus dos grandes partidos frente a Jordania y Grecia; dos victorias podrían llevarlos a la Segunda Ronda.
Dijeron: «En nuestra primera mitad salimos y tuvimos mucho fuego. En la segunda mitad perdimos un poco las piernas allí, pero en general podemos sacar muchas cosas de ese partido y trasladarlas al campo». los dos próximos partidos». – Rubén Te Rangi, Nueva Zelanda
«El apretón de manos inicial fue bueno, fuerte y contundente. Siempre fue una cuestión poder mantener eso durante todo el juego. Estoy orgulloso de mis muchachos, pasamos al siguiente juego». – Pero Cameron, entrenador en jefe de Nueva Zelanda
«Lo vi venir, estaba hablando con (el entrenador asistente de los LA Lakers) Phil Handy y él me dijo, ‘aquí aman a los Lakers’. Es especial para mí, soy de un pueblo súper pequeño, no mucha gente esperaba que estuviera aquí, representando a nuestro país, así que que me acepten de la forma en que me aceptan, significa mucho». – Austin Reaves, EE. UU., hablando de ser el favorito de los fanáticos en Filipinas
«Esa es siempre la ecuación. Como entrenadores, tienes que tener en cuenta todas estas cosas cuando decides qué esquema jugar, ya sea que cambies o abandones o lo que sea. Miras al oponente y descubres lo que necesitas hacer para ganar». «Ese juego. Algunas cosas con las que vives, entras en cada juego tratando de descubrir con qué estás dispuesto a vivir versus lo que no es negociable. Basamos nuestras coberturas defensivas en esos pensamientos». – Steve Kerr, entrenador en jefe de EE. UU.
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