Dinamarca quiere convertirse en el primer país 100% orgánico a nivel mundial. Y para lograrlo el gobierno danés dio a conocer su estrategia para tomar medidas al respecto.
Para tener un modelo sostenible, dicho país está trabajando en la conversión de los cultivos tradicionales a orgánicos y en la estimulación del aumento de la demanda de productos orgánicos. Una de las propuestas es duplicar los cultivos orgánicos antes de 2020, a lo que el Estado entregará subsidios a los agricultores que quieran ser parte de este proceso.
Otra meta del gobierno es que el 60% de las cosechas orgánicas se entreguen a hospitales, escuelas y comedores comunitarios. Y si bien se trata de un plan ambicioso, Dinamarca trabaja desde hace 25 años por alcanzar un alto desarrollo ecológico. Un ejemplo de ello es que, a nivel local, se han creado proyectos para que los municipios puedan crear huertos ecológicos en terrenos desocupados.