La resaca del gran día de montaña de la Vuelta a España 2016 ayer en tierras oscenses no deparó sustos a Nairo Quintana y Movistar Team en los 156 km de este lunes, bajo un acuciante calor por el Maestrazgo y la Sierra de Azahar antes de la meta de Peñíscola. El luxemburgués Drucker (BMC) se adjudicó un sprint masivo que el italiano Bennati (TNK) trató sin éxito de evitar con una acción de finisseur en los últimos dos kilómetros y medio. Por detrás, Nairo, bien resguardado hasta meta por los Herrada, Sutherland, Erviti, Castroviejo o Rojas, concluía en 19ª posición, a la vera de sus rivales en la general.
Los 3’37» amasados ayer en Formigal son la renta con la que Quintana llegará sobre Froome (SKY) al último breve bloque de la carrera en la Comunitat Valenciana. Un duro final en Mas de la Costa (miércoles); una etapa para velocistas o aventureros en Gandía (jueves); la trascendental CRI de Calpe, el viernes, y el agónico ‘fin de fiesta’ camino de Aitana, el sábado, son los últimos escollos que se interponen entre el genio de Cómbita y su máxima aspiración: ganar su primera Vuelta a España el domingo en Madrid.
DECLARACIONES:
Nairo Quintana: «Anoche todo el equipo se merecía una copita de cava para celebrar, por la etapa que se hizo, pero sin más. Tocaba descansar muy bien y tener los pies bien asentados sobre la tierra, pues quedan días duros y nerviosos. No solo Froome será mi rival: está Contador, que aunque esté también lejos no podemos descuidarlo un segundo; Chaves y los Orica… Nada se debe dar por sentado. Ha sido de los días con más calor de la Vuelta y es difícil refrigerar en jornadas así, pero todo se toma de otra manera cuando eres líder. ¿El calor?Lo llevo bien, lo prefiero al frío, aunque éste no me vaya mal».
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