ZAGREB, CROACIA: Se terminó la espera: ¡Argentina es campeón de la Copa Davis por primera vez! Federico Delbonis venció a Ivo Karlovic 63 64 62 y puso el 3-2 final sobre Croacia luego de la colosal victoria en cinco sets de Juan Martín del Potro sobre Marin Cilic en el 4°punto.
Lágrimas de emoción, abrazos de compañerismo, una algarabía sin límites en la pista. Y una fiesta en las tribunas: el Arena Zagreb se convirtió enseguida en un escenario celeste y blanco con festejos alocados en cada rincón del estadio. No es para menos, luego de cinco finales perdidas y de una temporada 2016 dura sin series como local.
No pudo ser en Cincinnati (1981), ni en Moscú (2006), ni en Mar del Plata (2008), ni en Sevilla (2011), pero sí en Zagreb. Y contra los pronósticos, ya que los locales partían como favoritos, con un Cilic en su mejor momento y ranking (n°6). Pero el talismán Del Potro, un capitán sabio como Daniel Orsanic y unos laderos confiables como Delbonis, Pella y Mayer le dieron a Argentina su primera Copa Davis.
Tiene enormes méritos el equipo argentino, que debió remontar un 1-2 tras perder el dobles ayer y recuperarse luego de que Cilic comenzara ganando 2-0 ante Del Potro hoy. Pero en Zagreb la historia estaba escrita en celeste y blanco y el trofeo vendrá por primera vez a un país latinoamericano.
Para ganar, primero hay que sufrir. Y Argentina sufrió mucho para llegar a ser campeón. Hoy, durante casi tres horas, Cilic estuvo en comando del partido ante Del Potro y llegó a estar a dos games del triunfo croata. Pero Delpo hoy fue una Torre imposible de derribar y, con coraje y mentalidad ganadora, aportó el punto más difícil de la serie con una victoria 67(4) 26 75 64 63.
Luego, impulsado por semejante victoria, Delbonis salió decidido ante Karlovic en el punto definitorio de la serie. Puso presión sobre el servicio del veterano de 2,11m en el inicio y, con devoluciones inteligentes -bloqueando o a media velocidad y con bolas bajas- pudo quebrar para llevarse el primer set. Lo mismo hizo en el noveno game del segundo set, con un resto a las zapatillas del croata para quedar a las puertas del título.
El festejo ya se preparaba en el estadio: los hinchas argentinos rebotaban en las butacas, mientras que los croatas habían bajado sus decibles. En el tercer set, Delbonis remató la faena en gran manera con dos quiebres para generar una montaña humana del equipo argentino en la pista no bien pudo concretar el match-point.
La espera terminó para Argentina, que hasta hoy era una de las naciones más dominantes de la última década que aún no había levantado la Ensaladera de Plata. En un país tan apasionado por el deporte, la celebración apenas comienza…