La burbuja llamada Ooho es una cápsula de doble diafragma fabricada en base a algas y que contiene agua potable. Si bien la idea de una envoltura biodegradable no es nueva, se está tratando de atraer con este tipo de productos, a aquellos consumidores preocupados por la protección del Medio Ambiente, haciendo hincapié en su aspecto “comestible”.

Este tipo de envases sería el ideal para reducir la cantidad de basura que se vierte, especialmente los plásticos que hoy mismo se están convirtiendo en un problema global, que va desde la proliferación de vertederos, hasta la contaminación de los mares y océanos.

Sean Coary, un experto en el comportamiento del consumidor de la Universidad de St. Joseph en Filadelfia, Pennsylvania, sostiene que: «Creo que muchos de las soluciones en todo el mundo, que tienden hacia la sostenibilidad y hacia una vida más responsable medioambientalmente, se basan en que el consumidor sea parte de la experiencia”. Y Coary agrega que: “para una persona que pretende tener una vida más “verde”, no es lo mismo comprar una botella que contiene un 30% menos de plásticos, que “comerse” el envase y no generar ningún tipo de residuo; esto hace que el consumidor se sienta parte de la solución, a lo que hay que agregarle el componente fundamental de la comodidad”.

Fuente: Reciclaje de Residuos

Fuente: Reciclaje de Residuos