“Bad luck” was the message Belinda Bencic kept hearing after learning she would play Venus Williams in the first round of Australian Open 2018. On Monday, the unseeded 20-year-old made her own luck, eliminating the seven-time major winner and fifth seed 6-3 7-5.
What appealed as one of the marquee match-ups in the women’s first round lived up to its billing, just as Bencic justified her reputation as one of the finest young talents in the women’s game. She is ranked 78th, but was inside the top 10 in 2016, and is surely headed back there. With wrist surgery now behind her, there is so much still ahead.
«Mala suerte» fue el mensaje que Belinda Bencic escuchó después de enterarse de que enfrentaría a Venus Williams en la primera ronda del Abierto de Australia 2018. El lunes, la jugadora de 20 años sin preclasificación hizo su propia fortuna, eliminando a la siete veces ganador y quinta semilla 6-3 7-5.
Lo que atrajo a uno de los enfrentamientos más importantes en la primera ronda de las mujeres estuvo a la altura de su facturación, justo cuando Bencic ratifico su reputación como uno de los mejores talentos jóvenes en el deporte femenino. Ella está clasificada en el lugar 78, pero estuvo dentro de los 10 mejores en 2016, y seguramente regresará allí. Con la cirugía de muñeca ahora detrás de ella, todavía hay mucho por delante.