Una fuerza incontenible en el primer Grand Slam de la temporada. En una jornada de temperaturas asfixiantes, donde los termómetros llegaron a tocar los 40 grados, Rafael Nadal demostró su frialdad para avanzar a los octavos de final del Abierto de Australia. El español , primer cabeza de serie del torneo, se empleó a fondo para superar por 6-1, 6-3, 6-1 al bosnio Damir Dzumhur y asegurar el pase a la segunda semana en Melbourne por 10ª ocasión en su carrera.
Nadal disputará los octavos de final del Abierto de Australia ante el argentino Diego Schwartzman, vencedor por 6-7(1), 6-2, 6-3, 6-3 ante el ucraniano Alexandr Dolgopolov. El mallorquín domina por 3-0 el FedEx ATP Head2Head ante el sudamericano (7-0 en sets), incluyendo un precedente en Grand Slam durante la segunda ronda del US Open 2015.
Al abrir la jornada nocturna en la Rod Laver Arena, Nadal encontró unas condiciones óptimas para el juego. Un ambiente templado que hizo volar las pelotas en el aire de Melbourne, favoreciendo el juego de ataque (27 tiros ganadores) y acentuando la capacidad para aprovechar la velocidad desde la devolución (42 de 75 puntos ganados al resto).