América Latina y el Caribe, una región rica en vida silvestre y recursos naturales, es también el lugar más peligroso del mundo para los defensores del medio ambiente. Allí ocurrieron 60% de los 197 asesinatos de defensores ambientales registrados en 2017 en todo el mundo, de acuerdo con la organización de monitoreo Global Witness.
«La mayoría de los conflictos que amenazan la vida de los defensores del medio ambiente están vinculados a la minería, a los grandes proyectos de infraestructura o a la expansión de la frontera agrícola», dijo Leo Heileman, director regional de ONU Medio Ambiente para América Latina y el Caribe.
«Es por eso que los mecanismos de consulta previa y participación pública, y las legislaciones específicas son clave para prevenir los conflictos. Es lo que llamamos democracia ambiental», explicó Heileman.
El 4 de marzo, 24 países de América Latina y el Caribe dieron un paso histórico que trae esperanza a la protección de los defensores del medio ambiente: adoptaron el primer acuerdo vinculante del mundo sobre democracia ambiental.
«Esta es una oportunidad para otorgar a los derechos ambientales la misma posición legal que tienen los derechos humanos a nivel mundial»
El Acuerdo Regional sobre el Principio 10 fue adoptado en San José, Costa Rica, luego de cuatro años de negociaciones.
El instrumento legal tiene como objetivo garantizar el derecho de las personas al acceso a la información, la participación pública y la justicia en asuntos ambientales, derivado del Principio 10 de la Declaración de Río sobre Medio Ambiente y Desarrollo, que fue adoptado durante la conferencia Rio + 20 en 2012.
“El gran mérito de este acuerdo regional está en colocar a la igualdad en el centro de los derechos de acceso y, por ende, de la sostenibilidad ambiental del desarrollo”, afirmó Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), organización regional de Naciones que ejerce la secretaría técnica de este acuerdo.
“Este es un acuerdo de segunda generación que vincula el medio ambiente con los derechos humanos y los derechos de acceso, y que sin duda va a contribuir a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030”, dijo Bárcena.
Este acuerdo pionero estará abierto a la firma de los 33 países de la región en la Sede de las Naciones Unidas en Nueva York, desde septiembre de 2018 hasta septiembre de 2020. Estará sujeto a la ratificación, aceptación o aprobación de los Estados que lo hayan firmado.
La primera conferencia de las partes será convocada por la CEPAL a más tardar un año después de la entrada en vigor del acuerdo.
«Esta es una oportunidad para otorgar a los derechos ambientales la misma posición legal que tienen los derechos humanos a nivel mundial», acotó Heileman, quien participó en la ceremonia de adopción en San José.
«Las personas tienen derecho a ser escuchadas. Si no apoyamos los esfuerzos para conservar el medio ambiente y proteger a los defensores, nos será imposible disfrutar plenamente de los derechos humanos, así como alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible «, sostuvo Heileman.
ONU Medio Ambiente brindó apoyo a las negociaciones regionales sobre este instrumento y el 6 de marzo lanzó en Ginebra una nueva iniciativa mundial contra los constantes actos de intimidación y asesinatos de defensores del medio ambiente.
La Iniciativa de Derechos Ambientales de la ONU tiene como objetivo ayudar a las personas a comprender mejor sus derechos y cómo defenderlos, ayudar a los gobiernos a salvaguardar mejor los derechos ambientales y movilizar al sector privado para defender los derechos de todos a un medio ambiente limpio y saludable.
Conozca más sobre el acuerdo del Principio 10 y la Iniciativa de Derechos Ambientales de la ONU.
Explore el trabajo del Medio Ambiente de las Naciones Unidas sobre gobernanza ambiental.