PARIS, Francia – La ex No. 9 del mundo Andrea Petkovic ganó apenas su tercer partido de la WTA en la temporada 2018 en el sitio de uno de sus mayores triunfos en su carrera, derrotando a la cuartofinalista del Abierto de Francia 2017 Kristina Mladenovic, 7-6 (10), 6-2.
«Creo que jugué sólido e hice lo que tenía que hacer», dijo después del partido. «La he derrotado muchas veces. Lo que más le molesta de mi juego es que resto muy bien y neutralizo su saque. Eso fue difícil para mí hoy porque estamos jugando en tierra batida y ella tiene una muy buena patada en el saque.
«Pero sabía lo que tenía que hacer, me quedé con mi plan de juego y lo que sé que funcionó en el pasado. Hubo muchas emociones porque fue una victoria importante para mí y sé que fue un momento difícil para ella».
La alemana llegó a la pista Suzanne Lenglen tras perder solo un set ante Mladenovic en cuatro partidos previos, incluido uno en el Abierto de Francia en 2014. Sin ser cabeza de serie y clasificada fuera del Top 100, mantuvo ese récord perfecto ante la francesa después de un emocionante tiebreak en el primer set que le permitió salvar cuatro puntos de set, tres seguidos de 3-6 abajo, y finalmente salir victoriosa en una hora y 42 minutos.
Petkovic avanzó a las semifinales de Roland Garros hace cuatro años, cayendo ante la eventual finalista Simona Halep, pero ha luchado con lesiones e inconsistencias desde que regresó al Top 10 en 2015. Ella comenzó esta temporada con una victoria dramática sobre Petra Kvitova en el Abierto de Australia, pero solo ganó un partido más del cuadro principal entre los dos primeros torneos importantes del año.
En cuanto a Mladenovic, ha sido un año de altibajos desde que destronó a la entonces reinante campeona Garbiñe Muguruza en el camino a cuartos de final. Mientras debutó en el Top 10 del ranking en individuales y se asoció con Timea Babos para ganar el título de dobles femenino del Abierto de Australia, la jugadora de 25 años había perdido 15 partidos de individuales consecutivos antes de llegar a la final del St. Petersburg Ladies Trophy en febrero.
Buscando redescubrir la forma que emocionó a sus fans hace un año, Mladenovic salvó tres pelotas de partido en un titánico juego final antes de que Petkovic cerrara la puerta y abriera un enfrentamiento de segunda ronda con Bethanie Mattek-Sands o la campeona del Nürnberger Versicherungscup Johanna Larsson.
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