Ni siquiera en la noche neoyorquina las altas temperaturas y la humedad dieron una tregua. El Estadio Arthur Ashe recibió este miércoles con las mismas condiciones de calor que castigaron durante toda la jornada a Rafael Nadal, que continuó la defensa de su corona en el US Open con paso firme frente a Vasek Pospisil. El número uno del Ranking ATP avanzó a tercera ronda por 6-3, 6-4, 6-2 en dos horas.

Después de haber disputado en su debut algo más de un set en su estreno tras la retirada de David Ferrer el pasado lunes, el manacorense tomó el pulso a la pista dura americana en un partido en el que terminó con 26 golpes ganadores y un sobresaliente 84% de acierto con su primer servicio.

Apenas un enfrentamiento figuraba en el FedEx ATP Head2Head. Se remontaba hasta Pekín 2015, donde Nadal se había anotado también la victoria en dos sets también sobre cemento. Y en Flushing Meadows nada cambió.

El cabeza de serie principal se bastó de un inicio con mordiente para poner el primer set más cerca de su lado. Con un parcial de 3-0, en el que no cedió un solo punto con su saque, arrancó el duelo en el que la distancia de ese break fue suficiente. Un 95% de puntos ganados con el primer servicio blindó la primera manga.

Nadal aceleró cuando lo necesitó, llevó el control del encuentro y dominó de principio a fin. Incluso cuando el canadiense amagó con reaccionar en el segundo set. Primero con un intento para romper el saque del español por con 2-1, 0-40 y más tarde con 3-2, 0-40. Una doble falta concedió la ventaja a Pospisil (2-4).

Pero como si de un espejo se tratase, Nadal devolvió el break en blanco. También una doble falta cerró el juego y el balear estableció la igualdad (4-4). Jugando bajo presión, el español impartió su mejor tenis, agresivo y definitivo con la derecha. No obstante, el parcial de cuatro juegos seguidos permitió al español anotarse también el segundo set.

Lejos de levantar el pie del acelerador, el break convertido por Pospisil sirvió para despertar a la bestia. Y desde aquel 2-4, Nadal enlazó seis juegos seguidos para escaparse también en el tercer set (2-0). Para entonces ya había tomado el control total del encuentro y un quinto break (5/7 en el partido) sentenció el choque (4-1).

En tercera ronda se encontrará por tercera vez esta temporada a Karen Khachanov. El No. 1 del mundo domina el cara a cara por 4-0 y no ha cedido nunca un set frente al ruso. Tampoco en su última cita en las semifinales del ATP World Tour Masters 1000 de Toronto. «Ahora viene un partido muy complicado ante Khachanov. Ya jugué contra él en Toronto. Es un jugador joven, con mucha potencia, que está mejorando, pero las condiciones creo que ya van a ser mejores para jugar».

Este viernes el español pretende ampliar su récord y firmar su décima victoria seguida en el US Open.

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