Novak Djokovic compite dispuesto a todo en el Abierto de Australia. El número 1 mundial avanzó este jueves a la tercera ronda en Melbourne Park tras deshacerse por 6-3, 7-5, 6-4 del francés Jo-Wilfried Tsonga en uno de los choques más esperados de la semana en el primer Grand Slam del año. El balcánico, que aspira a un séptimo título en suelo australiano, algo sin precedentes en toda la historia, dio un importante paso al frente y subrayó su condición de jugador a batir en el vestuario masculino.
Campeón de los dos Grand Slam más recientes, Djokovic volvió a domar el formato de las cinco mangas con la frescura de sus mejores días. El jugador de Belgrado apartó al antiguo No. 5 del Ranking ATP y comenzó a mostrar una velocidad de juego notable en Australia.
Los duelos previos en Melbourne Park anticipaban un encuentro plagado de emociones fuertes. Si Djokovic había abierto la rivalidad en 2008, levantando el primer Grand Slam de su carrera en Australia, Tsonga respondió en los cuartos de final de 2010 conquistando el primer choque a cinco sets entre ambos. Recuerdos lejanos en el tiempo pero bien marcados en la memoria. La intensidad de los partidos librados, auténticas batallas entre dos estilos que se complementan a la perfección, fue un aperitivo para el espectáculo a desplegar.También Podría Interesarle: Nadal v De Miñaur: La Noche En Blanco
En un partido de altísima velocidad de pelota, Novak puso a trabajar las piernas para neutralizar el potente juego de su rival. El serbio logró romper hasta en cinco ocasiones el servicio de Tsonga, abriendo una brecha de dudas en el esquema táctico del jugador galo. Su generoso juego de fondo fue primado en la amplitud de la Rod Laver Arena, donde pudo estirar a su antojo infinidad de intercambios.
En ese contexto de comodidad, Novak tuvo los reflejos afilados para impedir cualquier intento de reacción. Después de cerrar el primer set y asumir el control del segundo, Djokovic perdió el serbio cuando optaba (5-4) a colocar una ventaja casi definitiva. Lejos de entrar en pánico, y mostrándotelas un control total de la situación, el serbio reaccionó de inmediato para cerrar el parcial.
Fue un momento definitivo en la mente de Tsonga, incapaz de mantener ya el ritmo ante el vigente rey del ATP Tour. Apenas una rotura fue suficiente para que Djokovic marcase las diferencias en el tercer parcial, acercando su figura al ecuador del Abierto de Australia. Ante un obstáculo de grandes dimensiones como el que enfrentó nada más comenzar el torneo, Novak demostró estar preparado para cualquier reto.
El esfuerzo sirve para que Djokovic se asome este próximo sábado a un duelo ante el #NextGenATP Denis Shapovalov, un duelo hasta ahora inédito en el circuito. Un choque generacional para las delicias de cualquier aficionado.
atpworldtour.com