Maybe it’s a dream scenario.

Maybe it’s premature to get excited.

Then again, maybe it just might work.

Major League Baseball officials have become cautiously optimistic this week that the season will start in late June, and no later than July 2, playing at least 100 regular-season games, according to three executives with knowledge of the talks. They requested anonymity because the plan is still under consideration.

And not only would baseball be played, but it would be played in their own major-league ballparks, albeit with no fans.

MLB is considering a three-division, 10-team plan in which teams play only within their division – a concept gaining support among owners and executives. It would abolish the traditional American and National Leagues, and realign the divisions based on geography.

The plan, pending approval of medical experts and providing that COVID-19 testing is available to the public, would eliminate the need for players to be in isolation and allow them to still play at their home ballparks while severely reducing travel.

usatoday.com

Tal vez es un escenario de ensueño.

Quizás sea prematuro emocionarse.

Por otra parte, tal vez podría funcionar.

Los funcionarios de las Grandes Ligas de Béisbol se han vuelto cautelosamente optimistas esta semana de que la temporada comenzará a fines de junio, y no más tarde del 2 de julio, jugando al menos 100 juegos de temporada regular, según tres ejecutivos con conocimiento de las conversaciones. Solicitaron el anonimato porque el plan aún está bajo consideración.

Y no solo se jugaría béisbol, sino que se jugaría en sus propios estadios de las Grandes Ligas, aunque sin fanáticos.

MLB está considerando un plan de tres divisiones y 10 equipos en el que los equipos juegan solo dentro de su división, un concepto que gana apoyo entre los propietarios y ejecutivos. Aboliría las ligas tradicionales Americana y Nacional, y realinearía las divisiones basadas en la geografía.

El plan, pendiente de la aprobación de los expertos médicos y siempre que las pruebas de COVID-19 estén disponibles para el público, eliminaría la necesidad de que los jugadores estuvieran aislados y les permitiría seguir jugando en los estadios de su casa mientras reduce severamente los viajes.