PHOENIX (AP) La tarea más difícil en estos días para los Boston Celtics podría ser mantenerse humilde.
Jayson Tatum y Jaylen Brown anotaron 25 puntos cada uno, Malcolm Brogdon agregó 16 desde la banca y los Celtics avergonzaron a los descuidados Phoenix Suns 125-98 el miércoles por la noche.
“Disfrutas el momento, pero tienes que entender por qué lo hiciste”, dijo el entrenador de los Celtics, Joe Mazzulla. “Entonces tienes que saber que es un año largo. Esto nos podría pasar a nosotros. Puede que no, pero vamos a pasar por algún tipo de obstáculos a lo largo del año”.
Por ahora, los Celtics lo hacen parecer fácil.
Boston ganó por octava vez en nueve juegos, mejorando su récord de la NBA a 21-5. Los Suns, que llegaron al juego con el mejor récord en una concurrida carrera de la Conferencia Oeste, perdieron por tercera vez en cuatro juegos.
Tatum dijo que después de un par de viajes difíciles a Phoenix en los últimos dos años que terminaron en pérdidas, hubo un énfasis particular en este juego.
«Lo recordamos», dijo Tatum. “Eso estaba fresco en nuestras mentes. Queríamos un resultado diferente”.
El enfrentamiento esperado entre dos de los mejores equipos de la liga nunca se materializó con los Celtics ganando por 45 puntos. Los Celtics tomaron una ventaja de 31-21 después de un cuarto sobre los fríos Suns, que fallaron sus ocho intentos de triples.
Solo empeoró para Phoenix.
“No competimos de la forma en que necesitábamos competir esta noche”, dijo el centro de los Suns, Deandre Ayton.
Boston continuó construyendo su ventaja en el segundo, tomando una ventaja de 69-42 hasta el descanso. Brown lideró a los Celtics con 17 puntos en la primera mitad, mientras que Tatum tuvo 14. Grant Williams y Brogdon agregaron 12.
“Phoenix es un gran equipo y creo que la forma en que jugamos mostró el respeto que les teníamos”, dijo Mazzulla.
La segunda mitad fue esencialmente una ocurrencia tardía. Tatum conectó un tiro libre con 7:01 restantes en el tercero para llevar la ventaja de Boston a 40.
La noche de Phoenix se resumió en el tercer cuarto cuando Mikal Bridges, Chris Paul y Devin Booker intentaron agarrar un balón suelto, solo para desviarlo colectivamente a las manos de Marcus Smart de Boston, quien anotó una bandeja fácil.
«Parece que ese juego debería contar como dos derrotas, pero lo bueno es que todavía es solo una», dijo Booker.
Más tarde, el tres veces All-Star agregó: “No puedes culpar al esquema, no puedes culpar a la rotación ni nada por el estilo del entrenador. Tenemos que mirarnos al espejo como equipo y tenemos que arreglarlo”.
Los Suns le dieron la bienvenida a Paul, quien se perdió los últimos 14 juegos por un dolor en el talón derecho. Esas son buenas noticias para el pronóstico a largo plazo del equipo, pero tener al 12 veces All-Star en la cancha no ayudó mucho el miércoles.
Josh Okogie lideró a los Suns con 28 puntos desde la banca, el máximo de su carrera, mientras que Booker agregó 17. Paul terminó con cuatro puntos, cuatro rebotes y cuatro asistencias en 24 minutos.
Los Celtics tienen otro gran partido por delante el sábado, cuando viajen para enfrentarse a los Warriors. Boston perdió ante Golden State en seis juegos en las Finales la temporada pasada.
nba.com