Según la Organización Internacional de Trabajo (OIT), en la actualidad existen en el mundo 200 millones de desempleados, de los cuales 15 millones son latinoamericanos. Peter Poschen, director del Departamento de Empresas de la OIT, explicó a ConexiónCOP que los empleos asociados a la pesca, el turismo y la agricultura presentarán las mayores dificultades económicas. “La respuesta al cambio climático puede ser una oportunidad”, sostuvo Poschen, quien también es coordinador del Programa de Empleos Verdes de la OIT, e indicó que Brasil y México son los países de la región donde se están generando empleos verdes.

¿Cómo se ha visto afectado el sector laboral en el mundo como consecuencia del cambio climático?

Los impactos directos del cambio climático se han visto en eventos climáticos extremos, como huracanes en el Caribe y Centroamérica, pero dejemos en claro que es un tema global. Para el sustento de la vida hay cambios en los sectores que están muy dependientes del clima como la agricultura, la pesca y, principalmente, el turismo. Cuando hay un huracán devastador se destruye la infraestructura productiva de pequeñas empresas: ese es el lado claramente negativo que lleva a la urgencia y necesidad de adaptarse; y, a la vez, provoca que las comunidades y empresas se resistan a esos impactos, pero también es cierto que la respuesta al cambio climático puede ser una oportunidad.

¿Cuál es esa oportunidad?

La OIT lleva unos 10 años de investigación en diferentes países y llegamos a la conclusión de que es posible crear más empleos con políticas coherentes. Son necesarias políticas agresivas orientadas a hacer frente al cambio climático y cambiar el rumbo de desarrollo tradicional, basado en el uso de recursos naturales, de energía y, por ende, en el crecimiento de emisiones. México, Uruguay y Perú están avanzando en evaluaciones sobre posibles empleos que se generarán. Por ejemplo, una política ambiental en el tratamiento de residuos de sólidos en Brasil fue articulada con la formalización de recicladores tradicionales, y se dio una alta participación de mujeres. Esa política de reciclaje dio cuenta de que existe una realidad social y complicada que fue vinculada con la formalización. Actualmente hay más de 300 personas en ese sector con acceso a protección social, y sus ingresos se han multiplicado por 3 o por 5.