El año pasado América Latina generó el 9 por ciento de toda la basura electrónica del mundo, incluyendo teléfonos móviles, monitores de televisión y pequeños electrodomésticos, según un estudio de la Universidad de las Naciones Unidas (UNU) y la asociación de empresas de la industria móvil GSMA.
El informe advierte que la cantidad de estos residuos, conocidos como “e-waste”, está creciendo en todo el mundo, superando las 40.000 kilotoneladas en 2014. En los próximos años, podría subir entre 5 y 7 por ciento en Latinoamérica.
Los mayores productores de la región fueron Brasil y México, que produjeron 1.412 y 958 kilotoneladas respectivamente, principalmente debido a la gran cantidad de habitantes en estos países.
El estudio calcula que en promedio el latinoamericano produce 6,6 kilos al año, de los cuales apenas 29 gramos correspondería a los teléfonos celulares.
Solo unos pocos países de la región cuentan con proyectos de ley específicos sobre la gestión de los desechos electrónicos. Por eso, el informe llama a diseñar políticas públicas para abordar la recolección y el tratamiento de estos residuos.
Según un informe de la UNU en abril, a nivel mundial, Estados Unidos, China y Japón son los países que generan más basura electrónica a nivel mundial. Solo EE.UU. y China representan de forma conjunta casi una tercera parte del total.