Monica Puig ganó el oro en Rio, Karolina Pliskova se abrió paso en un Slam y Angelique Kerber ascendió al Nº 1 del mundo del ranking en el US Open durante un memorable verano el tour.
Mientras el mundo del tenis se dirigía a los Estados Unidos el verano, una intrigante subtrama se desarrollaba en medio de la caza de trofeos.
Serena Williams había reinado en la cima de la clasificación desde febrero del 2013, sin embargo, se enfrentó a un desafío inesperado debido a la rápida aparición de Angelique Kerber. En Wimbledon, Williams la mantuvo bajo control, pero mantener el statu quo durante los meses de verano resultó ser una prueba mucho más dura.
La chica de Oro Puig
Esta no era la única historia del verano. Los Juegos Olímpicos de Río produjeron un torneo de tenis digno de la etapa deportiva más grande del mundo y una medallista de oro que hizo olas mucho más allá de Copacabana.
Monica Puig se fue a los Juegos después de un año de gira en silencio. Lo que siguió, sin embargo, debe haber estado más allá de sus sueños más salvajes. Jugando el mejor tenis de su joven carrera, la puertorriqueña arrasó en las semifinales – sacando a Garbiñe Muguruza en dos sets en el camino – donde produjo una emocionante final para vencer a Petra Kvitova en tres sets de montaña rusa.
Con la más improbable de victorias – ninguna atleta puertorriqueño jamás había ganado el oro olímpico – ahora a su alcance, Puig no se negaría, venciendo a Kerber, 6-4, 4-6, 6-1, para crear la historia.
Nueva reina en Queens
En Cincinnati, Kerber tuvo otra decepción, perdiendo por poco ante Karolina Pliskova en la final. Si esto afectó a la alemana, lo escondió bien en el Abierto de Estados Unidos, donde dominó las primeras rondas para plantear la posibilidad de un enfrentamiento final con Serena para todo el éxito.
Sorprendentemente, fue Serena quien sucumbió, no logrando estar en la cita siendo superada por Pliskova en las semifinales. Esto aseguró que Kerber ascendería a la cumbre de la clasificación, independientemente del resultado en la final. La alemana marcó su coronación de manera adecuada, levantando su segundo Grand Slam con una emocionante victoria por 6-3, 4-6, 6-4 en Arthur Ashe.
«Siempre es difícil jugar contra ella», dijo Kerber después. «Estaba tratando de quedarme en el momento, ser agresiva, sólo estaba tratando de disfrutar de la final. Es un estadio increíble. Esto significa mucho para mí. Cuando yo era niña, siempre estaba soñando con ser la jugadora número uno del mundo y quería ganar Grand Slams, y hoy es el día».
Otras cosas…
Intercalados entre Wimbledon y el comienzo del tramo de la costa norteamericana fue la oportunidad de éxito en un par de lugares de tenis menos celebrada. Simona Halep, Viktorija Golubic y Laura Siegemund estuvieron entre las que aprovecharon la oportunidad para ganar los trofeos, triunfando en Bucarest, Gstaad y Bastad, respectivamente.
Como de costumbre, construyendo el camino hacia del US Open que se inició en Stanford, donde Johanna Konta se llevó el trofeo después de desarmar a Venus Williams en entretenida final. En Washington DC, Yanina Wickmayer recordó su potencial, antes de que la WTA se dirigiera a la frontera para una entretenida e impredecible Rogers Cup, finalmente ganada por una renaciente Halep.
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