Acapulco, Gro., 4 de marzo.- La racha invicta de Rafael Nadal en Acapulco llegó a su fin. Sam Querrey quiso darle un desenlace diferente al de las otras finales del español en el Abierto Mexicano de Tenis Telcel y a base de pura potencia venció por 6-3 y 7-6 (3).
El hombre que tenía récord de 28-0 en sets ganados y perdidos en el estadio Pegaso (ahora 28-2), simplemente no encontró la manera de nulificar el potente servicio de Querrey, que terminó con 19 aces en el encuentro, por uno del español. El estadounidense, que no figuraba entre los favoritos al título, venció por primera vez en su carrera a Nadal, y la victoria llegó en el escenario menos esperado, lo que dejó sin palabras a los casi ocho mil asistentes al partido. Rafael ganó este torneo en 2005 y 2013, cuando la superficie aún era de arcilla; la tercera corona se le negó en la cancha dura.
«Fue un día increíble para mí, ganar este trofeo representa mucho, fue una semana perfecta en la que puede vencer a grandes del tenis mundial», comentó Querrey al final del partido.
Querrey obtuvo su primer título de la temporada, después de vencer en este torneo a cuatro jugadores del top 20 (David Goffin, 11; Dominic Thiem, 9; Nick Kyrgios, 17 y Rafael Nadal, 2).
Un quiebre en el primer set le bastó al gigantón para quedarse con el parcial y demostrar que Nadal también es humano en Acapulco.
El desconcierto era notorio en el rostro del español, que batalló en sus turnos de saque y dejó escapar las oportunidades de rompimiento que generó (6).
“La cosa es simple, él fue mejor, jugué un poco mal en el primer set, él tuvo un nivel muy alto, rozó la perfección, sus golpes de fondo fueron muy buenos. En el tie-break fallé tres veces con el 1-0, busqué lo que creí que me iba a funcionar pero tampoco salió. Pero estoy feliz por esta semana”, dijo Nadal.
La efectividad de Querrey con su saque le permitió jugar con mucha seguridad, sin dejar que su rival se asentara, sacándolo de balance con potente tiros profundos con los que provocaba el error en la devolución.
A pesar de haber perdido las dos finales que ha disputado este año, el español se dijo confiado de ir por el buen camino y espera mantener el buen ritmo a lo largo de la temporada y se va satisfecho de Acapulco, «llegar a la final en dos de los tres torneos que he jugado es bueno, si me hubieran dicho en diciembre que esto iba a pasar, te lo firmo», concluyó.